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Opinión

Por Carla Tureo

La primera vez que vi «LAS TESIS» fue cerca de la Plaza Victoria, sentí cómo un escalofrío me recorría por el cuerpo. Por primera vez se estaba haciendo visible lo que toda mujer ha tenido que callar, si bien no concuerdo por completo en la forma en cómo este movimiento se fue desarrollando, por fin era un tema de conversación nuestra igualdad.

Lamentablemente, muchas personas tomaron al hombre como un enemigo y tampoco se trata de eso. Se trata de conversar lo que toda madre, hermana, hija, prima, sobrina ha tenido que vivir.  No existe mujer que no se haya sentido vulnerable, ignorada y menospreciada por sus pares, especialmente otras mujeres. Aún falta tanto para crear una conciencia colectiva de empatía, pero esta conversación está abriendo una nueva esperanza, de que por medio de la educación por fin exista una verdadera igualdad y, por sobre todo, respeto hacia la diferencia. Hoy esta nueva conmemoración del Día de la Mujer, espero que ayude a recordar que se deben seguir manteniendo canales de comunicación y redes de apoyo para seguir creciendo en inclusividad.

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